jueves, septiembre 15, 2005

Norteamericanización de la Psicología Social

La Psicología Social tiene sus orígenes a partir de 3 escuelas o corrientes sociales durante los siglos XIX y XX, ellas son y postulan lo siguiente:

1. Escuela Francesa:
Precursores: Emil Durkheim, Tarde, Le Bon, Comte. Ellos contribuyen en lo fundacional. Tienen un sesgo positivista y objetivista estructural. Imponen leyes que ejercen presión. Tarde es de la corriente individualista, reduce lo social a lo micro. Le Bon destaca por su trabajo de la Psicología de las masas, pone en relación que las masas son un momento de irracionalidad, que uno pierde el sentido y hace todo por imitación. Con Le Bon salta a la vista que las masas son peligrosas, que nos hacen volver a la barbarie, horda primitiva. Esta visión en los últimos años del s. XIX y principios del s. XX le viene como anillo al dedo a la presión de las masas obreras. Desde una visión actual, esto no debiera suceder, porque es primitivo.

2. Escuela Alemana:
Esta escuela de línea historicista se contradice sobretodo con el movimiento romántico a principio del 1800. Sostiene la tesis de que el hombre llega a ser hombre si pertenece a un alma social, a un espíritu del pueblo. Esta visión es contraria al positivismo y defiende a las ciencias sociales como ciencias humanas, del espíritu, porque tendríamos un conocimiento privilegiado en esta ciencia, porque nosotros al ser productos culturales, una construcción propia, podemos conocerla íntimamente. Lo social es un método totalmente distinto a lo natural. La naturaleza no es creación, se le conoce desde fuera, pero los productos culturales son construcciones de nosotros, social y cultural. Los seres humanos somos creadores del mundo cultural. No es matematizable, pero es un conocimiento de primera mano. Los alemanes luchan por esta visión de las ciencias culturales y del espíritu. Entre sus exponentes, está Erns March, quien hace una interpretación del positivismo. Inspira a la Psicología experimental en Alemania, de la cual W. Wundt es el exponente más importante. Por su parte W. Wundt, aporta con su Psicología de los pueblos. Hizo una separación para los procesos mentales superiores. Dice que para ellos se necesita otra metodología, distinta al empirismo metodológico, el laboratorio no sirve. Los procesos psicológicos superirores exigen otro acercamiento metodológico que es historiográfico, que apelar a lo cultural, es decir, comparar culturas en su singularidad en el tiempo, pues es interpretativo. La historia habla por sí sola.

3. Escuela Británica:
Otra vertiente sería el Evolucionismo Británico de H. Spencer, sociólogo que interpreta las teorías evolucionistas de Darwin, quien afirma que, “si las sociedades evolucionan, es porque tienen un curso propio de desarrollo, desde lo más primitivo, evoluciona naturalmente”. Si esto es así, hay que dejar que las sociedades evolucionen en su curso. Que haya la mínima intervención de algún aparato, como un campo libre de competencia, sin introducir ninguna regulación, no intervenir en la modelación social, sin la intervención de la mano humana. Lo ideal para esta ideología es que no haya regulación en el proceso de evolución. Esta interpretación entronca muy bien con la ideología liberal y con el capitalismo. Este pensamiento peligrosamente puede dar pie a pensar que hay sociedades más evolucionadas que otras.

4. Norteamericanización
Estados Unidos es un terreno donde crece y germinan cosas que no son de ahí, que venían desde Europa (mirada evolucionista positivista). En la postura norteamericana pesa mucho la tesis de Spencer. En Estados Unidos se elabora una filosofía propia – Pragmatismo – y que, fundamentalmente, es una versión del empirismo, que entiende el conocimiento básico como práctico, igual a la categoría de utilidad. Pensamiento práctico, postula que es verdadero aquéllo que resulta. Las ciencias se plantean en problemas concretos y el conocimiento científico consiste en solucionar estos problemas. Desde el pragmatismo las ciencias están abocadas a lo práctico y no a la teoría. Están pensadas en soluciones que nos competen como sociedad.

En esta concatenación de las distintas vertientes sociales, los alemanes quedaron apartados de la nueva Psicología Social Norteamericanizada. Entre Comte y Spencer se creó un bloque que germinó con mucha fuerza en Estados Unidos. Es en este punto donde comienza la historia de G. Allport, centro y foco del conocimiento, donde se levanta la Psicología Social, que es la que heredamos nosotros.

Los puntos iniciales de la psicología que nace en Norteamérica, son las fuentes de la psicología Europea como antecedentes históricos precientíficos y pre-Psicología Social, como una especie de promotores, pero no reconocidos como propiamente tal de Psicología Social. Los orígenes que se escogen para una Psicología Social, son aquellos que justifican y legitiman el estado actual de la Psicología Norteamericana, que tiene orientación hacia la individualización, una orientación psicologista, una orientación epistemológica positivista que pretende hacer Psicología social donde se puede hacer Psicología Social con el método científico, es decir un individualismo, un reduccionismo metodológico, dejando de lado aspectos que no pueden ser abordados sin este método.